La historia de Amed Velásquez Ortiz parece sacada de una obra de ficción, pero es la historia real de un individuo notable. Velásquez nació en 1988 en Quinchía, Risaralda, de padres que solo habían completado la educación primaria. Ante la falta de oportunidades laborales, su familia tuvo que mudarse a la zona rural de Orito en Putumayo, donde montaron una pequeña tienda para sobrevivir. Sin embargo, la región también lidiaba con el conflicto armado interno, y cuando Velásquez tenía solo nueve años, su padre fue asesinado.
Tras esta tragedia, grupos ilegales intentaron reclutar a Velásquez, lo que llevó a su madre a abandonar Putumayo y buscar estabilidad en Anserma, Caldas, para que su hijo pudiera completar su educación secundaria. Mientras su madre tuvo que irse a Cali por motivos laborales, Velásquez se quedó con una familia que lo acogió, incluyendo al Dr. Eugenio Gómez Calvo, cuyas dos hijas se graduaron de la Universidad de Manizales, lo que inspiró a Velásquez a estudiar derecho.
Desde su primer semestre, Velásquez trabajó para ayudar a pagar su matrícula y recibió becas por su rendimiento académico. Trabajó como asistente judicial en el sexto semestre, lo que lo llevó a estudiar por las noches para equilibrar ambas tareas. Su arduo trabajo dio frutos en el décimo semestre, cuando recibió una beca que cubrió el 100% de su matrícula por ser el mejor estudiante de su programa. Se graduó sin tener que completar una tesis o práctica judicial.
Después de obtener su título de abogado, Velásquez continuó sus estudios y obtuvo una especialización en derecho administrativo, derecho constitucional y derechos humanos, y una maestría en derecho público. Comenzó a enseñar en la Universidad de Manizales en 2015 y utilizó su plataforma para alentar a los estudiantes a convertirse en líderes y construir su futuro con la educación como base.
Como profesor comprometido y apasionado, Velásquez buscó cerrar las brechas de desigualdad que existen en la sociedad. Angélica Viviana Muñoz Arias, directora del Programa de Derecho de la Universidad de Manizales, elogió a Velásquez por su dedicación no solo a los problemas legales, sino también a los problemas humanos que lo rodean.
Hoy, Velásquez es asesor de la Presidencia de la República, trabajando en asuntos legales, proyectos especiales e iniciativas estratégicas. Su nombramiento es un testimonio de la calidad de la educación que ofrece la Universidad de Manizales y su capacidad para producir graduados capaces de ocupar los cargos más altos del país. La historia de Amed Velásquez Ortiz es un ejemplo brillante de cómo el liderazgo y la educación pueden ayudar a superar la adversidad y conducir al éxito.
Nota de la U de Manizales en:
