Daniel Cano

Los Desastres no son Naturales

Los Desastres no son Naturales. Extracto de la oración del Papa Juan Pablo II por las víctimas de la catástrofe de armero, domingo 6 de julio de 1986

“Padre celestial, de quien procede todo bien, recibe compasivo en tu seno misericordioso a tantos hermanos nuestros aquí sepultados por las fuerzas desatadas de la naturaleza. Condúcelos a la morada eterna que Jesús, tu Hijo, ha preparado a los que lo reconocen como tu enviado y lo sirven con amor, descubriendo su presencia en los hermanos más pequeños… Haz que, mediante la solidaridad, el trabajo y el tesón de las gentes de esta tierra, surja, como de entre las cenizas, una nueva ciudad de hijos tuyos y hermanos, donde reine la fraternidad, se renueven la familias, se llenen de pan las mesas y de cantos los hogares y los campos…”

Papa Juan Pablo II

¡Si!, en Caldas también murieron personas, por lo que siempre menciono que es la mal llamada tragedia de Armero, ya que este “titulo” desconoce y olvida las graves pérdidas presentadas en nuestro departamento

Columna relacionada: ¿Y la responsabilidad de la comunidad en la Reducción del Riesgo de Desastres? – InfoLibre

Un día como hoy, pero hace 37 años (13 de noviembre de 1985) un estratovolcán activo que se encuentra a 28 KM de Manizales, llamado Nevado del Ruiz, presento una erupción, la cual genero la fusión de aproximadamente el 10% del casquete de hielo que en este entonces adornaba esa imponente y atractiva montaña. A partir de ahí se generaron lahares que viajaron rápidamente con dirección a varias poblaciones de los departamentos de Caldas y Tolima, con una capacidad destructiva difícil de imaginar y con resultado de la muy lamentable perdida de aproximadamente 22.000 vidas en Tolima y 3.000 en Caldas (¡Si!, en Caldas también murieron personas, por lo que siempre menciono que es la mal llamada tragedia de Armero, ya que este “titulo” desconoce y olvida las graves pérdidas presentadas en nuestro departamento).

Erupción del Ruiz de 1985

Más allá de entrar a discutir quien tuvo la culpa de esta tragedia (y ojo, no fue el volcán) lo cual ya está claro, del dudoso manejo de recursos y hasta de la misma administración de la atención, rehabilitación y reconstrucción que se desarrolló a través del Fondo de Reconstrucción RESURGIR con el paso de tres gerentes generales en un lapso de 4 años, debemos un día como hoy hacer un alto en el camino y evaluar que tanto aprendimos de este desastre con el fin de evitar al máximo la pérdida de vidas por el simple hecho de seguir creyendo ¡eso que nos va a pasar a nosotros! O ¡acá no va a pasar nada!

Pero ¿qué es un desastre?, según la ley 1523 de 2012 (Política Nacional de GRD) en su artículo 4 nos dice:

“Desastre: Es el resultado que se desencadena de la manifestación de uno o varios eventos naturales o antropogénicos no intencionales que al encontrar condiciones propicias de vulnerabilidad en las personas, los bienes, la infraestructura, los medios de subsistencia, la prestación de servicios o los recursos ambientales, causa daños o pérdidas humanas, materiales, económicas o ambientales, generando una alteración intensa, grave y extendida en las condiciones normales de funcionamiento de la sociedad, que exige del Estado y del sistema nacional ejecutar acciones de respuesta a la emergencia, rehabilitación y reconstrucción.”

ley 1523 de 2012, artículo 4

Ojo con la parte en negrita “… Al encontrar condiciones propicias de vulnerabilidad…” se presentan daños o perdidas intensas y graves, lo cual nos lleva al titulo de este escrito el día de hoy, los desastres no son naturales. Qué culpa tiene el Volcán Nevado del Ruiz, de que construyamos asentamientos cerca a afluentes que nacen de su glaciar, cuando él lleva por estas tierras más de 1.8 millones de años, que culpa tiene él cuándo llevaba más de un año, si, ¡1 año! Enviándole todo tipo de señales a las autoridades y pobladores de que seguía activo para que se tomaran las medidas pertinentes y evitar lo que ya lastimosamente paso.

Petro Declara el Desastre Nacional

Hoy nos enfrentamos nuevamente a un desastre nacional, el presidente Gustavo Petro a través del decreto 2113 de 2022 declaro la situación de desastre nacional el 1 de noviembre, debido a las graves afectaciones generadas por el Fenómeno La Niña en todo nuestro territorio, la cual según datos de la UNGRD se vienen presentando las lluvias más fuertes de los últimos 40 años, que dejan en Colombia 204 muertos, 37 desaparecidos y 281 heridos, 488.502 damnificados (147.562 familias) en 772 de los 1.103 municipios, 5.840 viviendas destruidas y otras 77.045, seriamente averiadas. Que esto sea un llamado de atención a las autoridades territoriales a destinar e invertir los recursos con responsabilidad, y que ojalá no sea demasiado tarde para evitar otra tragedia como la de 1985.

Para terminar, recuerden: reducir el riesgo es nuestra mejor opción.

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