«Desde que salí del colegio yo dije, este es mi sueño, esta es mi vocación, lo voy a intentar y voy hacer todo lo que pueda para poder ingresar, espero servir a mi país, espero ser de gran ayuda para construir una mejor nación», fueron las palabras de Laura Daniela Sánchez Barrera, quien llegó a las instalaciones del Batallón de Artillería de Campaña N.°8 San Mateo en Pereira, para buscar uno de los cupos y ser parte del Ejército Nacional.
Con bombos, platillos y una alfombra roja fueron recibidas las 95 jóvenes que, a través de los medios de comunicación y las jornadas de incorporación en los 14 municipios de Risaralda, se enteraron de la oportunidad de ingresar a la institución más querida por los colombianos, y así poder cumplir un servicio de amor por la patria.
Junto a sus familiares, quienes veían con orgullo a sus hijas tomar esta decisión, cruzaron las instalaciones del Batallón y se dispusieron a presentar los exámenes médicos y sicológicos correspondientes, para saber si serán las próximas integrantes de la familia de la Octava Brigada.
Es así como Liliana Luna Buriticá, acudiente de una de las asistentes, asegura que: «me siento feliz, orgullosa de que mi hija represente al Ejército Nacional, ella desde los 18 años quería ingresar y ahora se le presentó esta oportunidad y por supuesto la familia le brinda todo el apoyo».
La jornada de incorporación al servicio militar voluntario para mujeres, se ha venido desarrollando en diferentes regiones del país y en algunos batallones del Eje Cafetero, buscando la equidad para contribuir a la paz y al desarrollo entre todos.
«Estamos muy contentos con la acogida, pendientes de la selección de estas 36 jóvenes que prestarán su servicio militar aquí en Risaralda, al igual que los dos contingentes de hombres», puntualiza el Teniente coronel Carlos Mauricio Salas Esteban, comandante del Batallón de Artillería de Combate N.8 San Mateo.
Es de resaltar que las aspirantes que sean aptas, pero por cupo no alcancen a ser parte del primer contingente, estarán en lista para conformar el segundo contingente del año, que iniciará en mayo de 2023.
“Desde niña siempre me ha llamado la atención, ahora que se presenta esta oportunidad le doy gracias a Dios, cuando llegaron los soldados a Mistrató y me contaron que estaban incorporando chicas, me emocioné, por eso pienso que a todas las que les guste o les llame la atención, lo hagan de una”, fueron las palabras de Yuri Natalia Flórez Quintero, aspirante a prestar el servicio militar voluntario.
Estas jóvenes fortalecerán la labor que realiza el Batallón San Mateo en el departamento de Risaralda y aportarán su vocación militar al servicio de su región.
