Luis Emilio Sierra, una figura reconocida en la política colombiana, expresó su descontento con el rumbo que ha tomado el Partido Conservador a nivel nacional. En sus palabras, el partido ha dejado de ser una opción viable para liderar el gobierno y ha quedado atrapado en una posición de oposición, negándose a negociar con la ley y promoviendo una autoridad legítima que debe estar presente en todas partes del país y no en unos pocos sectores.
Además, Sierra denunció la falta de coherencia en la política local del Partido Conservador en Caldas. Señaló que el aval del partido se otorgó a un candidato que, según él, carece de auténtica afiliación conservadora y ha tenido conexiones con otras corrientes políticas, como el Partido Liberal. Esta estrategia de camuflaje político no es algo con lo que Luis Emilio Sierra pueda conciliarse.
Durante su declaración, Sierra también expresó su desconfianza hacia la Registraduría Nacional del Estado Civil, citando experiencias previas de corrupción y manipulación de votos en elecciones pasadas. El político considera que las garantías electorales no son plenas y enfatizó la importancia de derrotar a los candidatos en las urnas en lugar de depender de procesos oscuros.
En cuanto a la pregunta de su apoyo al candidato Roberto Rivas, Sierra argumentó que no existe una contradicción entre su renuncia al Partido Conservador y su respaldo a Rivas. Sostiene que la Salvación Nacional, a la que planea unirse, comparte una ideología similar al Partido Conservador y busca atraer a las mejores personas sin importar su afiliación partidista anterior.
Sierra también confirmó que se está llevando a cabo un proceso de diálogo entre varios candidatos, incluyendo a Miguel Trujillo, Paula Toro y Jorge Betancourt, con el objetivo de seleccionar un candidato de consenso para enfrentar las próximas elecciones municipales. El político hizo un llamado a la sociedad civil y a los empresarios para participar en este proceso, subrayando la importancia de elegir a alguien comprometido con el bien común.