En esta acogedora cafetería todo el equipo de trabajo está conformado por personas con síndrome de Down. Ante esta importante posibilidad de inclusión laboral, el Gobierno de Caldas – a través de la Secretaría de Integración y Desarrollo Social-destinó recursos para apoyarla.
La iniciativa, impulsada por la Fundación Luciana Tovar Gómez, busca no solo ofrecer empleo, sino también desafiar los estigmas y prejuicios que aún existen sobre estas personas. Para hacer posible este sueño, la Secretaría de Integración y Desarrollo Social aportó 11 millones 500 mil pesos a la fundación.
“Estamos muy felices de poder acompañar y apoyar un emprendimiento de población con discapacidad como ‘Café Mágico’, ubicado en el bulevar de la 48 de Manizales. A ellos les aportamos 11 millones 500 mil pesos para hacer realidad un emprendimiento que va a permitir mejorar la calidad de vida no solo de las personas que atienen o trabajan directamente en el café, sino también la de sus familias”, indicó secretaria de Integración y Desarrollo Social, Juanita Espeleta Noreña.
Así mismo, Alejandra Gómez, cofundadora del Café Mágico señaló que este proyecto inició en enero cuando decidió buscar la manera de crear un nuevo lugar que permitiera solventar un poco los gastos de la Fundación, al tiempo que apoyaba al desarrollo integran de los niños, jóvenes y adultos que allí se forman; esto considerando que se sostienen por medio de donaciones.
“Desde que arranqué mi proyecto con la fundación siempre quise montar un establecimiento, con el fin de brindar educación a la sociedad, que la gente conociera a las personas con síndrome Down, sus capacidades y habilidades”, explicó Gómez.
Al momento el café cuenta con siete personas con síndrome de Down que trabajan como ayudantes de servicio, además son los encargados de hacer las preparaciones con la asistencia de un experto.
“Yo estoy muy feliz aquí en la fundación y me gusta trabajar en el ‘Café Mágico’. Hay buena actitud y tenemos una cajita atrás llena de productos; también tenemos las propinas que son voluntarias”, expresó Juan Pablo, una de las personas con Síndrome Down que trabaja en el lugar.
Este es uno de los emprendimientos de personas en condición de discapacidad que apoya el Gobierno de Caldas; estos mismos apoyos en capital semilla o convenios lo ha brindado a diferentes asociaciones en varios municipios de Caldas.