Las fuertes lluvias que se registraron en Manizales el domingo 20 de octubre generaron varias emergencias en diferentes puntos de la ciudad. Los barrios más afectados fueron Villapilar, Campohermoso y Liborio, donde se reportó la caída de árboles y el ingreso de agua en algunas edificaciones, como el caso del edificio Compostela. La Unidad de Gestión del Riesgo (UGR), en coordinación con el Cuerpo Oficial de Bomberos, intervino rápidamente para mitigar los daños y restablecer la seguridad en las zonas afectadas.
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Afectaciones en barrios y zonas críticas
Entre los problemas reportados, uno de los más críticos fue la inundación ocurrida en la glorieta de Socobuses, que provocó que un vehículo quedara atrapado en el agua. Este incidente fue atendido de inmediato por los bomberos, quienes desplegaron sus equipos para asegurar el rescate y despejar la zona.
En el barrio Villapilar, además de la caída de árboles, el edificio Compostela presentó el ingreso de aguas a sus instalaciones, lo que requirió una inspección exhaustiva por parte de las autoridades para evaluar la seguridad de la estructura y tomar las medidas necesarias para evitar mayores afectaciones.
Respuesta rápida de las autoridades
El director de la UGR, Diego Armando Rivera Gutiérrez, destacó la rápida actuación de los cuerpos de emergencia para restaurar las condiciones de normalidad en los sectores afectados. La intervención oportuna del Cuerpo Oficial de Bomberos fue crucial para contener las emergencias y garantizar la seguridad de los habitantes de Manizales.
Las autoridades continúan monitoreando las condiciones meteorológicas, ya que se espera que las lluvias persistan en los próximos días, lo que podría incrementar los riesgos de deslizamientos, inundaciones y caídas de árboles en otros puntos vulnerables de la ciudad.
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