Los soldados del Batallón de Infantería N.°22 Batalla de Ayacucho, llegaron con una Jornada de Apoyo al Desarrollo, a la plaza principal del municipio de Samaná en el departamento de Caldas. Con el próposito de integrar a la institucionalidad en zonas geográficas estratégicas que por décadas anteriores sufrió el rigor de la guerra y generar seguridad, confianza y bienestar a las comunidades
Con un emotivo discurso de agradecimiento a los soldados por parte de la primera autoridad del municipio, se dio apertura a la jornada y en ella el Ejército Nacional, con sus capacidades y las instituciones aliadas, llevó variedad de servicios gratuitos: recreación, globoflexia y pintucaritas para los niños; muestras artísticas; peluquería; odontología; medicina general; asistencia veterinaria, y almuerzo comunitario.
Para el Ejército Nacional, además de salvaguardar la vida de los campesinos y librar más de una batalla, es primordial la reconstrucción del tejido social, la consolidación del territorio y aportar al mejoramiento de las condiciones de vida de la población vulnerable. Estas acciones hacen parte de una estrategia con la que se focaliza el esfuerzo de acción integral y desarrollo en la acción unificada del Estado en un sector, para aportar en su desarrollo.
“Nosotros somos héroes sobrevivientes de una guerra, la cual nunca buscamos, nos llegó desde afuera, al Ejército Nacional inmensas gracias, no solo por lo que ha sido, si no por lo que es y seguirá siendo. Gracias por estas acciones donde al campesino se le da un apoyo del 150 por ciento” Jorge Eliecer Blanco Tabares, Presidente de la Junta de Acción Comunal.
“Este tipo de actividades buscan establecer y fortalecer procesos hacia el pleno desarrollo de una cultura de empatía y solidaridad, impulsando a la población civil a comprometerse, a ser autónomos y participativos en la implementación de proyectos y en la apropiación de un conjunto de valores, actitudes, tradiciones y comportamientos que garanticen la integridad territorial”, señaló el comandante del Batallón Ayacucho, teniente coronel José Francisco Candela