La comunidad educativa de la Institución Educativa Antonio Nariño, ubicada en el municipio de Filadelfia, Caldas, celebra un importante avance en su calidad de vida: la construcción de una Planta de Tratamiento de Agua Potable no convencional (PTAP). Este logro representa una mejora significativa en el acceso al agua de calidad, un recurso esencial para los 60 estudiantes, 10 docentes y el personal que trabaja diariamente en el plantel.
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Con esta iniciativa, no solo se aborda una necesidad básica, sino que también se refuerzan las condiciones para un ambiente escolar saludable y funcional.
Planta de Tratamiento de Agua en Filadelfia: Una realidad cercana
La construcción de la planta ha sido posible gracias al esfuerzo conjunto entre varias entidades clave. La Gobernación de Caldas, la Alcaldía de Filadelfia, el Plan Departamental de Agua y la institución educativa firmaron un acuerdo de voluntades que garantizará los recursos y la gestión necesaria para la implementación del proyecto.
Luis Wilfredo Garcés Ospina, rector del plantel, expresó su optimismo frente al impacto que tendrá la planta. Según sus declaraciones, este avance marcará un antes y un después en las condiciones de trabajo y estudio dentro de la institución. «Estamos garantizando que los estudiantes y docentes podrán tener mejores condiciones de vida», aseguró el rector.
Beneficios para la comunidad educativa
La nueva PTAP no solo garantizará agua potable, sino que también aliviará los problemas que los estudiantes enfrentaban a diario. Karen Eliana Villada Grajales, estudiante de noveno grado, subrayó la importancia de este cambio, explicando cómo las dificultades para acceder a agua limpia afectaban la hidratación y otras actividades cotidianas.
Con una inversión aproximada de 80 millones de pesos por planta, el impacto positivo se extenderá a otras instituciones educativas en el departamento.
Un esfuerzo regional: Quinta planta entregada en Caldas
El proyecto en Filadelfia se suma a las otras cuatro plantas de tratamiento de agua que han sido implementadas exitosamente en el departamento. Estas están ubicadas en Aranzazu, Pácora, Villamaría y un resguardo indígena en Riosucio.
Esta iniciativa refleja el compromiso del gobierno regional con el bienestar de las comunidades educativas, especialmente en áreas donde el acceso al agua potable sigue siendo un desafío.
Hacia una cobertura total
Se tiene previsto que una sexta planta sea instalada en la Institución Educativa Encimadas, ubicada en la zona rural de Aguadas. Este paso reitera la intención de extender los beneficios del agua potable a más instituciones, fortaleciendo el derecho fundamental al acceso al agua segura y promoviendo el desarrollo integral de las comunidades educativas.
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